Fe. Evangelio dominical


Jesús se encuentra de sopetón con una mujer inoportuna y pedigüeña, una extranjera decidida y con corazón de madre. Jesús se deja convencer por su fe y su gran humanidad. El evangelio nos presenta un episodio que en un breve diálogo expresa un profundo sentido de fe.

La Virgen de la Paloma, patrona de Madrid con permiso de la Almudena


Una de las tradiciones más arraigadas en Madrid es la devoción a la Virgen de la Paloma. Es la Virgen Castiza y patrona de los bomberos de Madrid. Es una tradición relativamente reciente ya que data de finales del siglo XVIII. Y resulta extraordinariamente curioso que, teniendo Madrid las joyas artísticas que tiene, haya tanta devoción y festejos de una imagen representada en un simple cuadro.

La Asunción de María renueva nuestra esperanza


En la solemnidad de la Asunción celebramos que la Virgen María después de su vida terrena fue elevada en cuerpo y alma a la gloria celestial. “Sólo la perspectiva de la eternidad puede dar valor auténtico a los acontecimientos históricos y sobre todo al misterio de la fragilidad humana, del sufrimiento y de la muerte. Contemplando a María en la gloria celestial, comprendemos que… aun entre las numerosas dificultades diarias, no debemos perder la serenidad y la paz. La señal luminosa de la Virgen María elevada al cielo brilla aún más cuando parecen acumularse en el horizonte sombras tristes de dolor y violencia. Tenemos la certeza de que desde lo alto María sigue nuestros pasos con dulce preocupación, nos tranquiliza en los momentos de oscuridad y tempestad, nos serena con su mano maternal. Sostenidos por esta certeza, prosigamos confiados nuestro camino de compromiso cristiano adonde nos lleva la Providencia. Sigamos adelante en nuestra vida guiados por María. ¡Gracias!” (Benedicto XVI)